Barrio de Farimagsgade: Kartoffelrækkerne
En el corazón de Copenhague, no lejos del puerto, hay una serie de calles estrechamente trazadas con casas aplastadas unas contra otras como hileras de patatas en un campo. Oficialmente es el barrio de Farimagsgade, pero los daneses lo llaman Kartoffelrækkerneliteralmente «hilera de patatas». El término tiene otro origen: este terreno, antes de convertirse en finca, era un verdadero campo de patatas.
Las hileras de patatas fueron construidas en las décadas de 1870 y 1880 por la Asociación de Construcción Obrera para proporcionar alojamiento barato e higiénico a los trabajadores. A finales del siglo XIX, cuando la industrialización cobró impulso y la gente empezó a trasladarse del campo a la ciudad, se hizo difícil y peligroso para la salud apretujar a más gente en toscos edificios de casas laterales y traseras dentro de las murallas de Copenhague. Así que la ciudad se amplió con nuevos edificios, y uno de ellos se convirtió en Kartoffelrækkerne con casi quinientos edificios.
Originalmente, cada casa de tres pisos era compartida por dos o tres familias y cada familia ocupaba un piso. A lo largo del siglo XX, hasta mediados de siglo, las hileras de patatas albergaban una media de ocho personas por vivienda. A lo largo de los años, el nivel de mantenimiento de las casas fue empeorando y, en los años 70, la ciudad estaba decidida a deshacerse de ellas y construir una autopista a través del terreno y sobre los lagos adyacentes. Pero los residentes lucharon. Junto con las autoridades locales, la asociación de vecinos de las filas acordó renovar las casas de arriba abajo.
A pesar de haberse construido para servir de alojamiento asequible a la clase trabajadora del siglo XIX, la hilera de la patata es hoy uno de los barrios más caros y codiciados de Copenhague debido a su céntrica ubicación, sus calles seguras y sus casas de tamaño perfecto con suficiente espacio privado.
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