Memorial a las víctimas del comunismo en Praga
Las figuras cada vez más deterioradas son un poderoso recordatorio de los costos humanos del comunismo checo.
De 1948 a 1989, el país antes conocido como Checoslovaquia estuvo gobernado por un régimen comunista que generó una persecución política generalizada contra los ciudadanos del país. Las víctimas de esta época tumultuosa son recordadas por el Monumento a las Víctimas del Comunismo.
Este impresionante monumento fue inaugurado en 2002, más de una década después de la caída del comunismo en el país. Para representar el sufrimiento de las víctimas del régimen, siete figuras de bronce, todos varones desnudos, pueden verse descendiendo una larga escalera, con miradas de desesperación en sus rostros picados. Mientras que la primera figura está entera, la segunda tiene un enorme desgarro en el torso, y la tercera le falta un brazo y parte de su cara. A cada figura sucesiva en la línea le falta un poco más de su anatomía, como si hubiera sido desgarrada, hasta la figura final que es poco más que un par de pies irregulares.
En caso de que esta representación sea demasiado simbólica para que los visitantes la entiendan completamente, una tira de metal recorre el centro de la escalera, detallando el número de víctimas a las que se está honrando. Las estadísticas enumeradas son las siguientes:
Víctimas del comunismo 1948-1989: 205.486 condenados, 248 ejecutados, 4.500 muertos en prisión, 327 muertos durante el cruce ilegal de las fronteras y 170.938 personas emigraron. El monumento fue inaugurado en mayo de 2002.
A pesar de los números, el tema del comunismo es continuamente controvertido y las estatuas no han sido universalmente bienvenidas, ya que un par de las figuras han sido dañadas por un intento de bombardeo no reclamado. Independientemente de la indignación de ambos lados, el Memorial de las Víctimas del Comunismo es un poderoso recordatorio de la complicada historia de la República Checa.
El monumento a las víctimas del comunismo en Praga fue creado por el distinguido escultor checo Olbram Zoubek en cooperación con los arquitectos Zdeněk Hölzl y Jan Karel. Está situado en la base de la colina Petřín, justo enfrente de la calle Vítězná.
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Fuentes: prague.eu, atlasobscura
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