Parque Nacional Masaya
Situado a sólo una hora de Granada en coche y a unos 20 kilómetros de Managua, el Parque Nacional Masaya es el más grande y principal parque nacional de Nicaragua y hogar del volcán Masaya, o «La Boca del Infierno«, el volcán activo fue nombrado después de plantar una cruz en el borde del cráter durante el siglo 16 con el fin de exorcizar al diablo. El Parque Nacional del Volcán Masaya incluye dos volcanes y cinco cráteres dentro de un área de 54 kilómetros cuadrados. El complejo volcánico está formado por un conjunto anidado de calderas y cráteres.
Ambos volcanes han hecho erupción en varias ocasiones a lo largo de la historia, haciendo que los habitantes locales indígenas y los conquistadores españoles temiesen la ira de los volcanes. Las erupciones han afectado dramáticamente el paisaje de los alrededores, y las rocas y cenizas volcánicas siguen cubriendo el terreno alrededor de los volcanes. Además, una variedad de vegetación comenzó a formarse después de las erupciones, ayudando a crear un entorno peligroso, pero tranquilo. El parque también está habitado por muchos animales diferentes, incluyendo coyotes, zorrillos, mapaches, zarigüeyas, ciervos, iguanas y monos.
